sábado, 26 de abril de 2008

La rampa


Hace ahora cinco años que un grupo de personas sin ninguna vinculación con partidos políticos, nos reunimos en el Restaurante Ottawa para preparar una lista que se presentara a las elecciones municipales del 2003. Pese a nuestra inexistente experiencia política, la falta total de financiación, compensada con una ilusión rayana en la ingenuidad, ante la sorpresa de propios y extraños, conseguimos un acta de concejal y Pepe Alcoba, Pepe Ottawa, se sentaba en el Salón de Plenos como representante del PIU. Desde el primer minuto dejamos claro que queríamos un pueblo mejor, grande, ambicioso, luchador, pero que no olvidábamos las pequeñas cosas, las urgencias del momento. Durante seis plenos seguidos, Pepe estuvo solicitando la construcción de una rampa al lado del semáforo de Algarrobo-Costa, sin que en ninguno de ellos se accediera a lo solicitado. Era imposible, imposible, imposible...
En las elecciones de 2007, Pepe y yo seguimos caminos distintos. Yo fuí en las listas del Partido Popular, convencido de que era la única alternativa viable para Algarrobo y el siguió en el PIU. Se que se alegró de nuestra entrada en el Ayuntamiento, de la misma manera de que yo me entristecí porque saliera él.
Una de las primeras acciones que pedí al entrar en el Ayuntamiento fue la construcción de esa rampa "imposible". Cuando los vecinos pasen por esa rampa, pensarán que el Ayuntamiento ha cumplido con su obligación, o ni siquiera eso, es algo que, simplemente, había que hacer. Yo no puedo evitar acordarme de mi amigo Pepe. Descanse en paz.

2 comentarios:

Adler dijo...

Aún recuerdo las caras de desprecio que tenían algunos concejales cuando Pepe traía una y otra vez la propuesta de la rampa, y la cara de hartazgo de Enrique cuando respondía sobre el tema de la rampa...
También me acuerdo en los Plenos cuando Pepe conseguía cabrear a Enrique con el regocijo de todos los que estábamos allí, y también cuando metía la pata y nos cabreabamos los que estábamos a su lado. Prefiero tener esos recuerdos de él que el otro, el de un paciente en coma al que tuve que atender en mi trabajo y que me costó Dios y ayuda plantearme la sedación.
Sólo me arrepiento de una cosa, no haber tenído el valor suficiente para haberlo inclído en las Listas del PP como seguro que le hubiese gustado. No sé si nos hubiese servido para tener más votos o los hubiésemos perdido, pero era lo que le prometimos Domingo y yo ... y no lo cumplimos.... Lo siento Pepe....Nunca te podrás imaginar cómo lo siento....

Ramona dijo...

manolin que no vales ni pa pegar sellos.
Deja a cordon el partido y tu vuelve a IU